Teniendo en cuenta que para crear una canción debemos saber que tipo de música queremos recrear, debemos conocer muy bien las notas musicales que vamos a usar, además del ritmo y pulso que queremos dar a esa canción.
Para ello es necesario reconocer ciertas figuras musicales básicas que permiten a cualquier compositor el poder crear sus nuevas canciones y/o ritmos. Una vez tengamos el ritmo o la base, lo siguiente es crear la letra, por lo que es necesario que lo que queremos decir en ella rime y termine concordando con el ritmo que hemos creado.
Las figuras musicales básicas son:
Donde cada una representa:
-Silencio: 0.
-Negra: 1 pulso o tiempo.
-Corchea: 1/2 pulso o tiempo.
-Semicorchea: 1/4 pulso o tiempo.
Un ejemplo de esto es:
Por otra parte, es necesario reconocer que en diversidad de canciones nos podemos encontrar un fragmento donde vemos o percibimos que hay un mismo ritmo tocado por diferentes instrumentos en tiempos diferentes, algo que al final termina creando una melodía única y diferente. Esto es denominado "canon" y es un recurso muy utilizado en la música.
Para terminar, es interesante desarrollar este proceso como una actividad lúdica para los niños porque así pueden crear por si mismos una canción sencilla a la vez que van reconociendo, mínimamente, sonidos musicales asociándolos a sus respectivas figuras. Con ello conseguimos que puedan ver a la música como otro tema de juego, el cual pueden incluir en sus actividades diarias.